Un novedoso método de enseñanza que revolucionó Italia y se expandió por el mundo. Una mujer que soñó con educar niños independientes para vivir en sociedades organizadas y justas. Una historia de coraje, pasión y entrega.
¡Imagínate! La primera mujer médico de Italia. Apenas se gradúa de doctora comienza a trabajar con niños y niñas abandonados por la sociedad. Desde entonces, dedica su vida a observar el desarrollo de los niños desde su nacimiento hasta la adolescencia, realizando descubrimientos sorprendentes que, hasta el momento, nadie había revelado de manera científica.
El Niño apareció ante el mundo como un ser humano lleno de potencialidades que se desarrollan en un proceso biológico y psíquico natural que, hasta entonces, la ciencia no había buscado descifrar.
En base a sus descubrimientos, diseña un Sistema Educativo muy meticuloso y preciso, basado en el conocimiento y observación del desarrollo natural del Niño. Elabora una serie de material educativo muy innovador sustentado en las necesidades de los niños.
Muy pronto, se comienza a hablar de la Educación Montessori. Y esto, ¿por qué?, pues, porque los resultados ¡son sorprendentes! Rápidamente se expande y es ella quien, personalmente, recorre el mundo, formando escuelas y maestros bajo estos nuevos descubrimientos. En decenas de países acogen su sistema y comienzan a educar niños autónomos y libres, con actitud científica, un sorprendente amor por el trabajo y capaces de emprender proyectos individuales sin limitaciones.
La rigidez del sistema tradicional de enseñanza, forzosa y memorística es reemplazada por la construcción de ambientes educativos que permiten al niño su desarrollo pleno y libre. Desde entonces hasta ahora, se reconoce a este sistema como uno de los más efectivos y armoniosos del mundo.
Infancia y estudios
María Montessori nace en 1870, en una provincia de Italia. Fue una destacada científica y pedagoga, doctora y médico psiquiatra, filósofa, antropóloga y luchadora por la Paz tres veces candidata al premio Nobel.
Desde joven se enfrenta a un mundo dominado por hombres, estudiando en una escuela técnica de Ingeniería y, posteriormente, como la única mujer en la carrera de Medicina. A veces debía esperar a que las clases terminaran para poder estudiar e investigar sin el hostigamiento o la exclusión que generaban sus compañeros varones. Pese a estas dificultades, se gradúa con excelencia y emprende un camino que pronto todos deberían reconocer.
Su camino como Pedagoga
Inicia su trabajo médico y a la vez pedagógico, dentro del área de la Psiquiatría, donde por primera vez emprende un proyecto con niños abandonados por la sociedad. Es allí donde descubre su misión en la vida y se dedica por entero al descubrimiento del desarrollo natural del niño y el cómo atenderlo adecuadamente.
Funda la primera escuela, llamada “Casa de los Niños”, ubicada en uno de los barrios más marginales de Italia, la cual le permite recibir y trabajar con los niños más necesitados de su país.
Los resultados son increíbles e impactan a toda Italia; tanto así, que la prensa del mundo llegaría intrigada para saber por qué, cómo y si era cierto que estos niños, considerados formalmente como “ineducables”, destacaban incluso por sobre los niños de los colegios más prestigiosos y caros de Italia.
Rápidamente se expande por el mundo la noticia y es llamada a replicar su experiencia en diversos países; publica libros, levanta centros de entrenamiento para docentes y se comienza a perfilar una verdadera revolución educativa. Se habla ya de la Nueva Educación.
¿Qué influencias tuvo Montessori?
Una de las influencias principales que recibe María Montessori fueron los trabajos realizados por dos grandes personajes: el filósofo de la ilustración Jean Jacques Rousseau y el pedagogo suizo Johann Heinrich Pestalozzi. La esencia de su método educativo, así como de lo hecho por Rousseau y Pestalozzi, proviene de los postulados de Sócrates en donde el educador es un "partero que ayuda al niño a dar a luz el conocimiento" reconociendo así que cada ser humano trae en sí un desarrollo natural de sus potencialidades y que el educador debe ayudarlo simplemente a desarrollarse.
Rousseau había rescatado, en el siglo XVIII, los antiguos principios griegos de la educación; y Pestalozzi había implementado estos principios, fundando escuelas y formando docentes. Montessori se basa en estos dos pensadores y elabora su Sistema educativo dando énfasis por sobre todo a: la observación del niño, la creación de un ambiente adecuado y la buena preparación de los educadores. En el ámbito científico educativo, se apoya en los trabajos realizados por dos importantes médicos del siglo XVIII y XIX: Jean Itard y su discípulo Édouard Séguin, ambos médicos del área de la Psiquiatría, quienes dedicaron sus vidas a la mejora de la educación de los niños, especialmente de los niños con necesidades educativas especiales.
El Material Montessori y el Educador.
María Montessori dedica gran parte de su vida, investigación y tiempo a diseñar y construir un material educativo específico para cada área y nivel de complejidad del conocimiento humano, destinado a niños desde la primera infancia, hasta la adolescencia. Material de: lenguaje, historia, geografía, aritmética, geometría, botánica, zoología, arte, música y vida práctica. Este material, tan cuidadosamente preparado, cumple con ciertos principios comunes como son: estar diseñado para atender las necesidades de los distintos periodos sensibles de desarrollo, permitir el trabajo autónomo y permitir la autocorrección en el niño evitando la corrección desmotivante del adulto.
(Ambiente Montessori de la Escuela Simón Rodríguez en Santiago de Chile)
El material Montessori suele ser confundido como lo central en esta metodología, pero más bien debe entenderse como una llave para que el niño acceda al conocimiento y prescinda lo más posible del educador. En realidad, lo más importante es que el educador esté bien capacitado para crear y mantener un ambiente apropiado para el niño, sepa cómo observarlo, detectar en él las necesidades y potencialidades a desarrollar, y aplique una metodología apropiada: ayudar al niño a hacer las cosas por sí mismo.
Rápidamente se expande por el mundo la noticia y es llamada a replicar su experiencia en diversos países; publica libros, levanta centros de entrenamiento para docentes y se comienza a perfilar una verdadera revolución educativa. Se habla ya de la Nueva Educación.
Los “guías” o educadores no solo deben ser expertos en el manejo del material y verdaderos “todólogos” conocedores integrales de cada área del saber humano, sino que, como la Dra. Montessori señaló reiteradamente: personas en constante proceso de mejoramiento personal. Es por esto que, para Montessori, el proceso de formación de un “guía” o educador, requiere de mucho tiempo y experiencia, siendo un proceso que nunca termina por completo.
Esperamos haberte dado una idea de quién fue la Doctora María Montessori.
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Escuela Simón Rodríguez
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